Para que esta aventura resulte gratificante para uno mismo y lo menos molesta físicamente hablando, hay que prepararse un mínimo para alcanzar el éxito en la peregrinación...
Esta peregrinación, dejando aparte la parte deportiva, cultural o personal, es en si un reto físico y mental que hay que preparar a conciencia...
Hay que pensar que habitualmente no estamos de 4 a 5 horas caminando a diario y que el simple hecho de cambiar ese hábito, es un reto, pero toda persona que se lo proponga, logrará, adaptando su cuerpo y mente al camino, el éxito seguro...